De acuerdo con un reciente informe, este tipo de trabajadores tienen un impacto financiero y cultural negativo en las organizaciones. El 54% de los “buenos” empleados podrían renunciar y el costo de contratar a un agente “tóxico” oscila en los $12,800 dólares en un equipo de 20 personas.
El estudio “Los empleados tóxicos en el lugar de trabajo”, elaborado por Cornerstone OnDemand, detectó que los costos indirectos de este tipo de trabajadores van desde pérdidas financieras hasta el fracaso de proyectos.
La firma de software de aprendizaje basado en la nube y capital humano analizó el comportamiento de 63,000 empleados cuya relación laboral fue disuelta por razones relacionadas a conductas “tóxicas”; tales como violencia en el lugar de trabajo, abuso de alcohol o drogas, acoso, fraude, falsificación de documentos y otras violaciones a las políticas de la empresa.
Entre los datos arrojados por el informe, resaltó que los “buenos” empleados tienen más probabilidades de renunciar si conviven con un empleado tóxico (54%); el costo de contratar a un trabajador “tóxico” es tres veces más alto que del uno que no lo es, de $12,800 dólares contra $4,000 dólares, y finalmente, el desempeño general de los empleados se ve mermado por las conductas de este personaje, generando estrés y agotamiento entre sus pares.
La compañía sugiere la utilización de herramientas tecnológicas de gestión de talento, tales como data Analytics, para predecir posibles conductas tóxicas y poseer los patrones de este tipo de comportamientos en la organización en un futuro. Sugiere además, contratación colaborativa y difusión proactiva de la cultura de la empresa en diferentes plataformas externas de comunicación.
El buen ambiente en la oficina puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso de un proyecto. Por eso, resulta imperativo identificar y apartar a los empleados tóxicos, o incluso prevenir su contratación, es uno de los retos más importantes a la hora de asegurar una correcta gestión del talento que ayude a lograr los objetivos de negocio de una organización, concluyó la firma.
