Una organización que es víctima de ransomware una vez no se salva de caer muchas más. De hecho, de acuerdo con Veeam, en América Latina 34% de las empresas reconocieron haber enfrentado en 2024 al menos dos ciberataques de este tipo; una cuarta parte, tres, y dos de cada 10, cuatro o más.
A nivel global, en el 69% de aquellas que tienen dos o más ciberataques de ransomware, “el segundo o tercero es [ejecutado] por las mismas personas que la primera vez”, reveló el director de Ingeniería de Sistemas para América Latina (AL) de Veeam, Dmitri Zaroubine.
De acuerdo con el experto, esto ocurre porque más allá de tener un respaldo aislado e inmutable, las organizaciones afectadas no llevan a cabo un análisis forense que les permita conocer el origen del ataque, que en algunos casos —comentó— puede ser de múltiples vectores, para cerrar la puerta a los ciberdelincuentes. Otra razón, añadió, es que se instala un respaldo que también ha sido infectado.
Al presentar el Reporte de Tendencias de Ransomware 2025 en la región, que reúne la opinión de alrededor de 200 organizaciones de las 1,300 que entrevista la compañía en todo el mundo, Zaroubine aclaró que el informe, en el que 21% reconoce haber sido víctima de al menos un ciberataque, contabiliza ataques confirmados.
Pago de rescate por ransomware, a la baja
El informe de Veeam señala que 55% de las empresas en la región pagaron un rescate por ransomware y recuperaron los datos. “El porcentaje de pagos está cayendo mucho. En 2019, esta cifra estaba alrededor de 85%”, comentó Zaroubine.
Al abundar sobre las razones de esta disminución, explicó que no solo se debe a la decisión de las organizaciones de no pagar, sino a que también se han creado leyes en distintos países, incluso en la región, donde se prohíbe el pago de rescates.
“Esas leyes son buenas. Si nosotros seguimos pagando los rescates, seguimos financiando a esas organizaciones ilegales, terroristas, y nunca las vamos a cortar. Esas leyes nos van a ayudar a acabar con ellas”, opinó.
Por otro lado, Veeam descubrió que 24% de las organizaciones atacadas con ransomware no pagaron, pero pudieron recuperarse por sus propios medios. “Un porcentaje bastante bajo”, calificó.